viernes, 19 de marzo de 2021

Potingues

Hermanísima no necesita comprarse cremas, le paso todas las que no tolera mi piel sensible, a ella nunca le dan problemas. En mi adolescencia, con mi acné de paella, la piel sensible era una tortura, los tratamientos de acné me irritaban y me salían aún más granos, en un círculo vicioso y doloroso. Probé de todo, y aunque los dermatólogos no lo recomiendan, una de las cosas que mejor me ha ido siempre para bajar la inflamación de los comedones es la pasta de aspirina: nada más simple que humedecer una aspirina hasta convertirla en una pasta, ponerla encima del grano inflamado y dejar que seque el mejunje antes de retirarlo (ya sea sacudiendo el polvillo o con agua). 

Supongo que el acné y la piel sensible despertaron mi interés por la dermatología, un interés más personal que profesional. Dado mi trabajo, no está de más tener nociones de otras especialidades, en medicina todo tiene relación y la piel está en casi todas partes. No sé si por esas nociones, y por toda la información de internet, asumo que todo el mundo tiene un conocimiento básico sobre el cuidado de la piel, pero solo tengo que echar la vista atrás y recordar lo qué sabía en mi adolescencia para darme cuenta de mi error. Hermanísima me ha hecho ser consciente:

- Esto se pone por la mañana y esto otro por la noche- le explico tras contarme que lo hacía al revés.- Hay productos que se degradan por la luz. 

- El protector solar va encima del hidratante, es el último paso antes del maquillaje, se supone que crea una película para proteger la piel del sol y el resto va debajo.

-¿Y esto otro? ¿Qué es? ¿Para qué sirve? ¿Y esto?...- me pregunta hermanísima, perdida en un sinfín de muestras (mea culpa).

En fin, mejor escribo un post

El primer paso del cuidado básico de la piel es la limpieza. El limpiador no va a estar mucho tiempo en contacto con nuestra piel, por lo que no se necesita un producto caro que luego se van a llevar las tuberías. Si se tiene acné va bien uno con ácido salicílico, en el resto algo suave que no deje la piel como un pergamino, NADA DE JABÓN, el pH es muy agresivo. Si se usa agua micelar, hay que aclararla. Los dermatólogos recomiendan mucho el limpiador de CeraVe, personalmente me gusta el paño de microfibra que solo necesita agua templada y se lleva todo con apoyarla en la piel. 

Tras la limpieza y con la piel ligeramente húmeda, se usan los activos, habitualmente el serum , aunque también se incluyen productos antiacné (sin retinoides por la mañana y con por la noche), antioxidantes y tratamiento de la pigmentación (aquí irían la vitamina C, que tiene ambas funciones, por la mañana, y los derivados de la vitamina A, o sea retinoides, por la noche). 

Después de los activos, se puede aplicar una capa de ácido hialurónico que sella esos activos y los vuelve más potentes. Hay que tener cuidado cuando lo que hay debajo pueda ser irritante, como los retinoles, en ese caso es mejor dejar el hialurónico de lado. 

Sobre el hialurónico se pone una crema hidratante, más o menos ligera según el tipo de piel. Sin la hidratante encima, el hialurónico puede extraer agua de la piel y resecarla, así que no hay que olvidarse de la hidratante. Las hidratantes suelen contener ceramidas, que restauran la función barrera de la piel, ácidos grasos y otros emolientes como urea (en porcentaje menor al 10%, si no es exfoliante e irrita), alantoína...

Durante el día, no hay que olvidar el protector solar, FUNDAMENTAL, los que tienen pigmento también protegen de la luz visible y la luz azul de los ordenadores (aunque es mínima comparada con la solar). Esta luz visible también se ha visto que daña la piel. La cantidad es importante, más o menos el tamaño de una moneda, hay que cubrir bien la piel, no se trata de maquillarla sino de protegerla, si se pone menos, el índice de protección se reduce (también se reduce por el uso de aceites).

Esta sería la rutina básica, a veces la crema hidratante ya viene con activos y se pueden unir esos pasos en uno, o el protector solar es hidratante y también funciona como paso conjunto. 

Ahora, la pregunta sería cuales son los principios activos y como combinarlos. El tema tiene su ciencia, cuando vienen mezclados en un producto, el laboratorio se ha encargado de estabilizarlos en la fórmula, cuando se juega a los boticarios en el baño, hay que tener en cuenta varios factores. 

La vitamina C, cuando viene como ácido ascórbico (y también el etil-ascórbico, más estable, menos irritante y con mejor absorción), es un ácido, y se inestabiliza a pH más altos y con la luz. Es antioxidante, antimanchas y estimula la síntesis de colágeno, pero puede ser irritante y es difícil de combinar porque se neutraliza y neutraliza activos con pH más neutro o básico, como retinoides y niacinamida, con el uso combinado con otros ácidos los vuelve más irritantes, como los exfoliantes químicos o el azelaico. Una vez abierto, se recomienda usar en 3 meses, si se oxida y se vuelve marrón, deja de ser eficaz. Hay derivados más estables a pH más combinables, aunque no está claro si son igual de potentes. Combina bien con otros antioxidantes. Skynceuticals tiene una fórmula con ferúlico más estable y combinable, aunque también carísima. Un truco es poner la vitamina C al levantarse, a los 15 minutos ya se ha absorbido y se puede limpiar la cara con una toalla húmeda y poner otros activos (por ej. niacinamida en caso de acné). The Ordinary tiene el Etyl-ascorbic acid a un precio más que razonable.

La niacinamida es calmante y ayuda al acné y al tratamiento de las manchas. En este caso más no es mejor, se recomienda al 5% porque si no es irritante. Se puede usar antes o después que otros activos, es indiferente. Salvo con ácido ascórbico o etil-ascórbico, se puede combinar con casi todo. Está presente en muchas cremas hidratantes. 

El retinol, ADEMÁS DEL PROTECTOR SOLAR, es la molécula antiedad por excelencia, y es el tratamiento de elección en el acné. Se presenta con distintas moléculas desde el retinil que se transforma en retinol y de ahí en retinaldehido y luego en retinoico que es la molécula activa. Para el acné, el adapaleno, un derivado del retinoico, se tolera mucho mejor. El retinoico es de prescripción médica en muchos países pero en España es barato y se compra en farmacia con el nombre de Retirides, por supuesto hay que empezar con dosis de 0.025 y a días alternos o cada 3 días, se puede tardar meses en poder aumentar a 0.05 y años en llegar a 0.1% (o nunca). El efecto antiedad depende de la constancia, no de la concentración que se use, así que lo importante es usarlo e insistir durante años. Se inactiva con la luz solar por lo que debe ponerse solo de noche. El Retinaldehido de Avene es excelente y se tolera mejor que el retinoico. Hay una versión para el contorno de ojos, más suave. Todos los retinoles están CONTRAINDICADOS en el embarazo.

Las noches que no se use retinol, se puede usar un exfoliante químico (no uno de partículas que además de arañar la piel, dañan el medio ambiente). En este grupo están el ácido glicólico, el láctico (más suave), el mandélico (todos estos hidrosolubles por lo que no se recomienda su uso con aceites), el salicílico (que al ser liposoluble penetra más en profundidad en el poro y se recomienda en acné). Si la piel es sensible, dejarlos actuar un rato y luego retirar e hidratar. Cantabria labs tiene un producto combinado de Retinol y Glicólico, excelente antiedad para el que lo tolere (no es mi caso), con el nombre de Retincare. 

Los péptidos son moléculas hidratantes que se supone contribuyen a la síntesis de colágeno y algunos tienen efecto botox (como la argirelina). Salvo con ácidos (exfoliantes y ascórbico) se pueden usar con cualquier otro activo. 

El ácido azelaico (Finacea en farmacias, además de estar en muchas cremas despigmentantes o acné) se puede combinar con casi todo salvo otros ácidos, como exfoliantes y vitamina C. 

La alfa-arbutina es una molécula despigmentante derivada de la hidroquinona pero más suave y sin los problemas de esta última (cuyo uso debe ser controlado por un dermatólogo). Además tiene la ventaja de que se puede combinar con todo. Los aceites, de los que hable hace tiempo, también combinan con todo, excepto protectores solares, y van especialmente bien con los retinoides. En caso de pigmentación, se deben evitar los que contengan ácidos grasos saturados. Se pondrían como último paso, su efecto es emoliente-hidratante. Cuando se necesite un oclusivo para proteger una zona, antes de poner un activo, o cuando se quiera potenciar, habría que recurrir a la vaselina. 

En resumen:

Acné: ácido salicílico/glicólico, azelaico, niacinamida y retinoides. También peroxido de benzoilo (no más del 5% por la irritación), antibióticos (tópicos y sistémicos) y por supuesto isotretinoina y espironolactona (un mineralocorticoide) sistémico. E

Antiedad: protector solar, retinoides, vitamina C, péptidos, exfoliantes.

Antimanchas: vitamina C, azelaico, niacinamida, exfoliantes, alfa-arbutina (además de ácido kojico, raíz de regaliz, hidroquinona...)

SIEMPRE, SIEMPRE, SIEMPRE: PROTECTOR SOLAR, en todos los casos. 


4 comentarios:

Carmen dijo...

Mañana tomaré notas. Hoy he realizado la primera lectura pero esto es más difícil que la física cuántica. Creo que es más cómodo lo que hemos hecho esta mañana: vienes a mi casa, me dices cuando aplicarme cada cosa y yo lo apunto en los botes. Je, je, je

Unknown dijo...

Queridísima y admiradísima Sol
No sé de dónde sacas tanto tiempo para derrochar tanto ingenio, si entre tu trabajo cotidiano y el que te proporcionamos los rendulianos, yo no dispondría ni de un minuto.
¡ENHORABUENA Y MUCHAS GRACIAS!

Unknown dijo...

Con estos consejos nos ponemos guapísimas.
Gracias querida Doctora por compartir .

Paloma dijo...

Ay prima estudiando melo que estoy, ya le he dicho a Carmen que me haga un cursillo como todas las cremas y orden para prepararme. Mil gracias por tanto Consejo tan documentado. Paloma, muac