miércoles, 29 de febrero de 2012

Lenguaje figurado

El buen uso del lenguaje incluye no sólo la riqueza de vocabulario, que permite expresar con precisión lo que una desea, sino también el emplearlo de modo figurado y sobreentender que los oyentes lo interpretarán así, y no literalmente.

Cuando una abuela dice que se comería a su nieto, aunque muchas veces a una le apetecería que lo cumpliese y librase al mundo del verraco en cuestión, nadie lo interpreta en su sentido literal de antropofagia sino que comprende que se refiere a lo tierno y gracioso que le resulta el chiquillo. Aunque hay quien tiene razón, la mayoría suele estar cegada por la pasión de abuela, que no les permite ver la auténtica realidad.

Igualmente en un momento de crispación se puede decir que "se mataría a alguien". Si esto fuese literal no habría discusiones al respecto de la jubilación de los políticos ya que ninguno sobreviviría a su mandato. El problema surge cuando el interlocutor es un inculto o tiene una lengua materna diferente. El ponente asume que posee un nivel mínimo de español y, al no ser así, el ignorante asistente a la conferencia interpreta literalmente la expresión. No se deja orientar por la reacción de sus compañeros, que se ríen ante la gracia del chiste. El pobre orador puede verse en el brete de que la policía se presente de forma inesperada e intempestiva en la puerta del domicilio.  El confeso homicida, al menos de intención, se verá obligado a dar una clase de lingüística avanzada en comisaría para no terminar con sus huesos en el calabozo. Con bastante comprensión y sentido del humor por parte de los agentes, y aún mejor suerte si alguno de ellos domina el español mejor que el malpensado oyente, la cosa no trascenderá hasta los juzgados, donde sería el letrado el encargado de explicarle las peculiaridades idiomáticas al Sr. Juez.

Aclarar las cosas con el anónimo y cobarde acusador es harina de otro costal. Nunca dará la cara y convertirá en incómodas las situaciones en las que se reúna el mismo grupo de gente que en aquella charla malinterpretada. Por supuesto, además de ignorante, suele ser un vago bastante estúpido pero está claro que, aunque uno lo mataría para deshacerse de él, aquí la frase vuelve a tener un sentido figurado.

martes, 28 de febrero de 2012

¡Felicidades sobrinísima!

Hoy es el cumpleaños de sobrinísima y el consejo de Mafalda le viene como anillo al dedo. Nunca se ha podido decir que fuese la niña más sociable del mundo, siempre le ha gustado lo de ir contracorriente. El motivo fundamental es que es dueña de un sentido extremo de la justicia con lo que tolera regular todo lo que se salga de este concepto. Lógicamente lo pasa muy mal. Eso de nacer Quijote no es lo que mejor se adapta a las circunstancias del día a día. En su honestidad no entiende cómo nadie puede mentir y traicionar voluntariamente. Carece de malicia y es incapaz de fingir y, si alguna vez lo ha intentado dentro de su inocencia infantil, nunca ha conseguido engañar a nadie. Esta claro que, al igual que su tía, su abuelo y su bisabuelo, no tiene cualidades ni para la política ni para la diplomacia. Opino que también tiene que haber gente que diga las cosas como son y, en ese sentido, no es que vaya por buen camino sino que ha tomado la autopista más ancha (que debe ser de peaje porque son pocos los que circulan por ella y, al menos la mitad del tráfico, parece pertenecer a la familia).


La pobre chiquilla esta en los comienzos de la complicada adolescencia. El cambio del colegio al instituto le ha resultado un molino muy duro al que enfrentarse. No sabe que cuando llegue al mercado laboral la cosa será muchísimo peor, pero de momento está ocupada venciendo al desalmado gigante de la ESO. Es una lástima que la alternativa de ermitaña en una isla desierta sea tan poco viable aunque, si fuese de otro modo, no quedarían ínsulas por conquistar.

Afortunadamente para ella su hermana es todo lo contrario: sociable y Sancha. Al igual que las mías han limado asperezas de mi carácter, sobrinísima aprenderá de las virtudes del ciclón y, espero que, al igual que Sancho, el bicho también termine por aplicarse los honorables valores de su hermana.

¡FELIZ CUMPLEAÑOS SOBRINÍSIMA!

lunes, 27 de febrero de 2012

El hada Mercedes

"El hada azul" Gustav Tenggren

Pinocho tenía su hada azul y los primos teníamos a nuestra tita Mercedes de Linares. La prima de nuestra abuela, con su corazón de oro, no sólo adoraba a ésta, sino a toda su parentela. Le encantaban los chiquillos y nos mimaba como la peor de las abuelas. No se veía harta de nuestros abrazos e, incluso en sus peores momentos de ánimo, sacaba su sonrisa con nosotros. Si todo el mundo tiene normalmente dos abuelas, con nuestra amplia familia necesitábamos una más.

El término pereza le era desconocido. Su actividad era constante y no le entraba en la cabeza que pudiese ser de otro modo. Era feliz así, necesitaba sentirse no sólo querida sino también útil. Se había ocupado de sus ancianos padres hasta el final y, al faltarle estos, se encontró perdida y fue rescatada por mis abuelos. En muestra de agradecimiento quiso hacerles la vida más cómoda a los de su entorno, sin llevar nunca la voz cantante, siempre a la sombra de lo que le marcase su adorada prima. Volcó su amor y su natural instinto maternal en todos nosotros. Era la primera en amanecer y se ocupaba de adecentar la enorme granja y lograba que todo estuviese reluciente hasta el punto de poder comer sopas en el suelo. No es que durase mucho en ese estado, dado el tránsito que recorría esos suelos, pero eso no desanimaba a la tita, sino todo lo contrario. Intentó inculcarnos, con más éxito en unos que en otros, ese mismo afán por el orden y la limpieza. Yo soy su gran fracaso, al igual que en el tema de las oraciones que con tanta devoción nos enseñó.

Le gustaba mucho el teatro y nos suministraba material para nuestras funciones. Disfrutábamos con sus historias de juventud, en la que actuó cómo actriz aficionada en pequeñas representaciones en Canena. Nos recitaba las coplas del Tren y conseguía que nos desternillásemos de risa con las peripecias de la pobre pueblerina subida a aquella cafetera humeante e infernal. Nos describía con voz suave el viaje del hada azul a la tierra hasta convencernos de que no había mujeres comparables a las Manolas españolas.

Se apagó cuando le faltó mi abuela, perdida de nuevo después de una vida juntas, pero los recuerdos de ambas son inseparables.

domingo, 26 de febrero de 2012

El color del cristal del día

Todo depende del color del cristal por el que se mire, pero el tono varía al levantarse cada mañana. Por mucho que la mente desee ver siempre "la vida en rosa", el cuerpo puede pensar de otra manera. La intensidad del matiz va acorde a las sensaciones. Percibir el color que tiñe cada instante no suele ayudar a que una sea capaz de cambiarlo, pero al menos puede intentar que un día malo salpique lo mínimo al entorno.

Hay días rojos, en los que se está irritable sin remedio. Rechinaría los dientes de pura rabia ante cualquier mínima provocación y, si fuese un animal sin civilizar, mordería a más de uno. Controlarse cuesta un triunfo. Si no es posible recluirse, lo mejor es guardar silencio, las palabras que se sueltan en esos momentos pueden tener repercusiones. Hay que ser consciente de que el resto del mundo no tiene la culpa de ese mal humor. Claro que, esa lucidez, requiere un gran esfuerzo. La concentración que exigen las cirugías ayuda a refrenar la violencia de los impulsos.

Los días grises son tristes, de pérdida, llenos de congoja y preocupación. En esos momentos se necesita un hombro en el que desahogarse y un abrazo reconfortante.

Hay días blancos, brillantes, luminosos y románticos. Son días para estar en pareja.

Los días dorados son felices. Esos días una estallaría de alegría. La energía se desborda y la tolerancia es fácil.

Un día azul es melancólico, apático, sensible. Son días para quedarse en casa y disfrutar del sofá, bien acurrucada, con un buen libro o una bonita película.

Cuando el cristal es rosa, el optimismo me hace soñar despierta, impregna el futuro. Es el cuento de la lechera con final feliz.

He aprendido a huir de la gente con días negros, llenos de pesimismo egoísta, en los que se hunde a los de alrededor. Los que los tienen consiguen que un día blanco se cubra de nubes grises. No albergan por ello ningún sentimiento de culpa, al contrario, son desgraciados y los demás deben frustrarse con ellos y autoflagelarse por su situación. Cuando se consigue escapar de la influencia de uno de estos chantajistas emocionales, identificables entre otras cosas por refugiarse en el mutismo durante varios días pero sin dejar de llamar la atención ni alejarse del rango visual de sus víctimas, una vuelve a descubrir el arcoiris.

PS: Para los lectores dominicales, con enlaces para navegar y distraerse. 

sábado, 25 de febrero de 2012

El arte radiológico de Javier Comas

Un valiente soldado, listo para el ataque, explora la garganta de un pequeño guerrero. 

Las curvas de las arterias se transforman en la ondulación vital del mar. 

El flujo de la sangre tiñe la marea. 

Javier Comas imagina otra realidad. Superpone imágenes, les da movimiento y relieve, las impregna con rompedores contrastes y plasma sus emociones en sus obras hasta recrear con su arte su visión del mundo. 

A partir del 7 de marzo se podrá disfrutar de su exposición a las 7 de la tarde, en el Centro Cultural Villa de Móstoles.  




viernes, 24 de febrero de 2012

RISOL

El Risol es la bebida con la que se hacía la sobremesa en la granja, generalmente junto con un trozo de fino y crujiente pastelón, de hojaldre recién hecho.

Se sirve en copas poco más grandes que un dedal y se bebe a pequeños sorbos, paladeando cada gota. Me acuerdo de acompañar a mi madre a comprar el anís Machaquito, seco y fuerte, para su preparación. Luego mi abuela ponía en unos barreños la mezcla y la dejaba reposar a oscuras, en la despensa, mientras las hierbas maceraban en el alcohol y lo aromatizaban. La cantidad de cada ingrediente puede ajustarse según los gustos personales de cada uno. El resultado es un licor anisado, dulce y suave, de color caramelo, muy aromático, con un sabor equilibrado que combina a la perfección tanto con el pastelón, como con los mantecados, las rosquillas y, por supuesto, los pericones. Lo mejor es que prolonga la tertulia de la sobremesa hasta las 5, las 6 o las 7 de la tarde, lo que permite disfrutar de la compañía, además de dar tiempo a hacer hueco para probar todos los dulces caseros. Aunque mi abuela ya no se encargue de elaborarla, la tradición sigue y son las hermanas Li, la tita Cati y la tita Carmen las encargadas de su producción para uso, deleite (y flagrante robo de botellas en cada visita) del resto de la familia. Pese a la minidosis, los tres litros duran un suspiro, especialmente tras el paso de los saqueadores.

RISOL


Ingredientes
1 botella de anís seco (el mejor es el Machaquito, si no se encuentra también va bien el de Chinchón seco, el que lleva el tapón con una raya verde).
2 litros de agua
Unos granos de café (medio puñado)
1 manzana pelada partida en trozos grandes
1 plátano pelado en trozos
Medio kg de azúcar
Ralladura de chocolate negro
Un puñado bien hermoso de hierbaluisa
Un puñado más pequeño de hierbanieta (calaminta)
Otro puñado pequeño de toronjil (melisa)
Entre las hierbas opcionales, según gustos, en muy poca cantidad: manzanilla (que mi abuela sí usaba) y mejorana (orégano). 

Elaboración
Poner todos los ingredientes en una olla grande.
Resguardar de la luz (mi abuela la guardaba en la despensa).
Dejar macerar durante 3 días.
Colar y embotellar.

Servir frío, con pastelería artesana, a ser posible.

jueves, 23 de febrero de 2012

Chiquilladas

Billete es un niño grande. La Cucucá siempre ha secundado y salido en defensa de su marido cuando este lo necesitaba. Dada su naturaleza algo quijotesca, esto ha sido preciso en más de una ocasión. Cuando se pone al volante su paciencia con los energúmenos que circulan a sus anchas, sin ningún respeto por el resto de los que tienen la desgracia de tener que compartir con ellos la calzada, es prácticamente nula.Una de las más sonadas ocurrió cuando un conductor realizó una sonada pirula que encendió a mi impulsivo tío. Éste no se cortó en mostrar verbalmente su enfado y, en cuestión de segundos, puso al otro de vuelta y media. Ambos tenían las ventanillas bajadas. Además de poco cívico, debía de ser también de temperamento irascible y, sin grandes miramientos, se bajó de su coche y se acercó al de mis tíos en toda su altura y envergadura de 2x2 metros. Billete es un tío grande de espíritu pero, para su desgracia en esos instantes, no externamente. Ofuscado, no valoró bien lo crítico de la situación y continuó haciendo gala de su vehemencia. En vista del cariz tan negro que tomaban los acontecimientos, mi tía se decidió a intervenir. Con una sonrisa, asomó su linda carita por la ventanilla y, tras desarmarle con su dulce sonrisa, le suplicó con cariño a aquel armario: "¡Déjalo! No le hagas nada. ¿No ves que es un chiquillo?" Gracias a ella, Billete consiguió salir indemne de la peliaguda situación. Claro que, no todas las consecuencias de sus ocurrencias, son evitables a base de palabras.

Una de las desventuras del hiperactivo chiquillo ocurrió en la sierra, donde se había subido con sus hijos a jugar con la nieve. Ni que decir tiene que Billete disfrutó como los indios lanzándose por las cuestas en trineo. En una de esas, vislumbró un montículo de nieve y no pudo resistirse a él. ¿No sería genial poder lanzarse como los dibujos animados sobre la nieve y sentirla ceder mientras se hundía bajo sus pies y frenaba su caída? Ni corto ni perezoso se subió a la elevada copa del árbol que había al lado de aquel tentador acumulo. Contempló el panorama a sus pies. El suave contorno de aquel montón blanco resultaba aún más atractivo desde su nueva posición. Se sintió como un ruso al salir del vapor de la parilka antes de revolcarse por la nieve. Por desgracia, su ubicación entre las ásperas ramas no le permitía quitarse la ropa para experimentarlo del mismo modo. Todo se andaría, pensó.
Con una sonrisa de anticipación tomó impulso y saltó. Por desgracia las cosas no resultaron como se había imaginado. Al igual que les ocurre con frecuencia a los desafortunados personajes de los Looney Toons,  la lisa silueta escondía la trampa de una roca en su interior. En una digna imitación del coyote, los pies de Billete se estrellaron contra la piedra en su aterrizaje. El crujido de sus talones indicó que no iba a poder realizar más saltos en una temporada al no estar hechos sus huesos de trazos de lápiz. Las estrellas que flotaron ante sus ojos se debían a que se había fracturado ambos calcáneos. Una escayola le mantuvo forzosamente tranquilo en casa durante una buena temporada mientras se recomponía de nuevo.

miércoles, 22 de febrero de 2012

Creatividad

Julieta Aytas
La propia escritura arrastra al escritor. Según se entretejen palabras con ideas, al enlazar las frases entre sí, estas parecen ramificarse e incorporar en el proceso nuevos argumentos a la trama, que se alimenta a sí misma. El autor se convierte así en un mero instrumento, encargado de transcribir una historia que, en principio creía de su cosecha y, que enseguida descubre, es de los personajes. Si se esfuerza en encauzarlo para adaptarlo a su plan original, el resultado final acabará por parecer forzado y poco creíble.

Convivir con los protagonistas durante el proceso de creación-transcripción es una tarea absorbente. Su protagonismo traspasa las fronteras de la imaginación y se convierten en una compañía constante. Están presentes en cualquier momento, desde el instante de amanecer. Al despertarse en mitad de la noche aprovechan para hacer su aparición estelar y resulta imposible volver a conciliar el sueño. En ese caso, lo mejor es aprovechar esas horas de silencio y tranquilidad externas para escribir como una posesa. Adquieren una dimensión real aunque sea una forma de existencia distinta. Están a caballo entre la imaginación y la realidad y eso les confiere una intensidad que envuelve de un aura de extrañeza las rutinas habituales. Cambia la perspectiva ordinaria, como si se viese desde el punto de vista de los personajes, que viven en un entorno diferente. El escritor convive con ellos en su mundo, al tiempo que mantiene el contacto con el suyo, como si se encontrase en la zona de intersección entre ambos.

No se pierde del todo el norte, pero uno se siente impelido a escribir. Este acto se convierte en una necesidad, si no lo hace, le falta algo. Las interrupciones le alteran y llegan a resultar traumáticas. El tener a sus protagonistas a su alrededor provoca una sensación de felicidad comparable a la de estar con alguien muy querido y añorado. Se convierten en seres entrañables y, una vez terminado todo el proceso creativo, pasarán a formar parte de su persona.

martes, 21 de febrero de 2012

Opiniones dispares

Recibo múltiples opiniones en relación a sobre lo que tengo que escribir, o al menos en lo que se refiere a lo que a cada uno le gusta leer. Lo curioso es que son totalmente dispares. Hay días que me encuentro con alguien que me comenta lo que le gusta la sección de recetas, con su disertación previa de los recuerdos asociados a ese plato en concreto para, apenas unos instantes después, encontrarme con otro que me dice que la parte culinaria no le va mucho, al menos la parte entre fogones, porque, lo que es disfrutar del resultado, le gusta a todo el mundo. Unas quieren ideas de peinados y trucos de maquillaje, mientras que a otros no les va ni mucho ni poco la parte de estética. Aún así tengo pendiente el tema del pelo y, la verdad, es que me apetece mucho. Lo relacionado con las compras es bien acogido por las mujeres, pero no goza del favor de la mayoría de los hombres. Supongo que no lo ven desde la perspectiva de lo útil que puede resultarles disponer de una guía a la hora de salir a comprar regalos para las féminas. Unos me piden críticas de restaurantes, que yo pongo encantada, sobre todo cuando he disfrutado de la salida y de la comida como ocurrió con El Paraguas, y hay otros que pasan por completo de este tipo de entradas. Por supuesto, lo relacionado con recuerdos y perfiles familiares tiene un gran éxito entre los implicados, pero bastante menos entre los ajenos a la familia. Hay un tema que suele agradar a todos los lectores. Esto ocurre cuando afilo el lápiz y destripo los entresijos del hospital. Supongo que si esos comentarios llegasen a los oídos, o a los ojos, de los criticados dejaría de haber unanimidad en la apreciación. El gran Titón, después de la entrada sobre Dickens, me sugirió más posts sobre escritores y recomendaciones de libros. Dado que me comenta regularmente, tendré muy en cuenta sus sugerencias.

Empecé el blog ante la insistencia de algunas de mis primas y amigas con la idea de dar recomendaciones de compras. Fue secundado por mis corresponsales habituales de e-mail que disfrutaban con mis crónicas y desahogos ocasionales sobre el día a día. De paso, pensaba añadir críticas de libros y, por supuesto, lo que se me ocurriese por el camino. Sin embargo, estos temas han quedado casi relegados a un segundo plano y, lo que básicamente hago es escribir las memorias familiares de la Granja.

Para no tener una gran cantidad de lectores, he de reconocer que las opiniones son de todo tipo. Las agradezco, así como los comentarios. Muchas veces me inspiran nuevas ideas para las entradas. Intento contentar a todos, y también a mí misma, que a fin de cuentas soy la que escribe y lo hago sobre lo que se me pasa por la cabeza en cada momento. Supongo que la "fuga de ideas" es uno de los motivos por los que el blog tiene tantas secciones.

Muchas gracias por opinar.

lunes, 20 de febrero de 2012

Honor profesional

Sir Joshua Reynolds - Justice
El honor profesional de los médicos se pone en ocasiones en entredicho. Es un tema indignante. Hay una escoria de periodistas sin escrúpulos que están a la que salta y aprovechan la ocasión de publicar cualquier denuncia a este gremio. Por supuesto lo hacen sin documentarse previamente en las circunstancias implicadas en el incidente. La medicina no son matemáticas, el 100% no existe e, incluso lo más sencillo, es susceptible de complicarse seriamente. En muchas ocasiones, las complicaciones no se deben a errores ni a una mala praxis, sino a factores intrínsecos del paciente. Un ejemplo serían las variantes anatómicas infrecuentes, que resultan casi imposibles de diagnosticar con antelación, sobre todo si están afectadas por la patología a intervenir. Desgraciadamente se descubren una vez han dado lugar al problema que provoca que el galeno se siente en el banquillo, al igual que si fuese un delincuente. Se le trata como a un criminal, así como a sus testigos, que son interrogados sin cortesía ni piedad. Son sometidos a un tercer grado mientras el abogado de la acusación busca indicios inculpatorios y trata de provocar contradicciones en su declaración. Al parecer la tortura psicológica no es ilegal en este tipo de cuestiones.

Para colmo de desdichas, la justicia no es siempre ni justa ni objetiva, y eso es un hecho. Depende mucho del carácter del juez en cuestión y de los argumentos esgrimidos por el abogado, así como de la manera de exponerlo. Si, además, hay un mal peritaje de por medio, del que se ha encargado algún incompetente con renombre (parece una contradicción , pero el caso es que los hay), el asunto se pone aún más negro. Los jueces no saben de medicina, no comprenden lo que suponen el paciente y su patología para casi todos los cirujanos. En las intervenciones el médico se esmera en superarse para curar con los mínimos inconvenientes. No siempre lo consigue pero la intención es esa. Si no, uno habría escogido otra profesión menos sacrificada, con menores exigencias y  responsabilidad, y mucho mejor remunerada. La excepción sería precisamente el "incompetente con renombre", al que le van bien las cosas a costa de desprestigiar a la competencia y tener engañados a sus "clientes" (para él no son pacientes sino su fuente de ingresos). Estos charlatanes no corren riesgos, así, difícilmente, serán demandados. Hacen el paripé en muchas cirugías, sin llegar a realizar la técnica en cuestión (que ya le llegará a otro, de esa competencia contra la que arremeten, aunque para entonces el paciente estará en peores condiciones y, por lo tanto, el cirujano tendrá más papeletas de acabar demandado). Aún así, el nuevo médico, preocupado por el paciente, acepta el reto pese a los riesgos que este entraña.

El que un médico aparezca en los periódicos despierta el interés morboso de los lectores, casi como si se tratase de una desventura de un personaje del corazón. Sin embargo, la noticia de haber salvado una vida, lo que ocurre a diario en todos los hospitales, no se publica nunca. El honor, la dignidad, el respeto y la presunción de inocencia son conceptos anticuados que pueden pisotearse a voluntad. A ninguna tribu más que a la "civilizada" le parecería sensata la idea de enconarse con su curandero.


sábado, 18 de febrero de 2012

Saturday Evening Post: JAVIER COMAS

El 7 de marzo se inaugura en Móstoles la exposición de Javier Comas (en el enlace a su web están todos los datos). Se trata de un interesante artista que se inspira en las placas radiográficas desechadas para dar vida a su arte. Esta es la reseña para el catálogo de la exhibición: 

"Una radiografía es "sólo" la imagen plana y velada de sombras de densidades superpuestas. ¿Sólo?

Javier Comas sabe ver más allá del diagnóstico médico y descubre con su obra un mundo mágico y evocador.
Su recorrido por el camino de baldosas amarillas va mucho más allá de la Ciudad Esmeralda de la cual se erige como mago indiscutible. Aviva el recuerdo de las flores de ensueño del país de Oz para enganchar al público con la belleza de sus eclipses. Tras vencer a la noche oscura, libera la luz que asciende, protegida por frágiles esferas, entre ritmos de arcoiris.

El equilibrio de sus simetrías se realza en ocasiones con serenas tonalidades, para romperse en otros momentos con sobrecogedores contrastes. A través de complejas redes enlaza pasiones y desvela la inquietud de sus desenlaces. Los mismos cuadros se fragmentan y se engarzan entre sí, del mismo modo en el que lo hacen sus figuras.
Las sugerentes formas, su composición y la elección del color dejan su impronta en la sensibilidad del espectador que no permanece indiferente ante la creatividad del artista.

En resumen: originalidad e inspiración, unidas con talento, en esta bella exposición. " 

viernes, 17 de febrero de 2012

Crema catalana de Miss Corn

Tengo debilidad tanto por la crème brulée como por la crema catalana (la diferencia entre ambas es que la primera utiliza nata líquida en su elaboración y la segunda sólo leche). Suelo pedirla de postre cuando la veo en alguna carta, por lo que la he probado en diferentes partes del globo. No en todas partes consiguen darle el punto magistral en el que la crema es muy ligera, suave, con un punto de aroma a limón y canela, no excesivamente dulce, y la costra está bien caramelizada, sin llegar a estar quemada, muy crujiente y con el azúcar completamente disuelto. Me encanta clavar con decisión la cuchara, hasta quebrar la fina capa de la superficie. En la boca, el caramelo cruje un instante entre los dientes, antes de diluirse y mezclarse con la crema, sin resto de granulaciones que raspen en el paladar.
Tomé una crème brulée inolvidable en Estocolmo, en un restaurante del muelle de la Ciudad Vieja que, simplemente por la perfección de este postre, se merecía su buena fama.
En Francia, en la región de Bresse, en un acogedor restaurante alojado en una casita de piedra de un pequeño pueblo, galardonado con una estrella Michelín, nos sirvieron de postre un surtido de cuatro pequñas porciones de crème brulée aromatizada. Las versiones de violeta y de amaretto se quedaron grabadas entre los deleitables recuerdos de mi memoria gastronómica. Soy afortunada por contar con ese tipo de memoria, gracias a la cual puedo rememorar no sólo el plato, sino incluso el sabor y las sensaciones que experimenté al probarlo.
La versión de Bica de Marcelo, en Santiago de Compostela, está basada también en este postre, además de en las torrijas (como ya expliqué en la entrada correspondiente).
En Madrid, Andrés Madrigal en el Alboroque hacía una crema catalana tan buena como la de Estocolmo. Lástima que luego, en el Bistró, echase a perder todo su buen hacer.
Cuando fuimos a comer al restaurante de la Escuela de cocina de Fuenllana, en la que estudia Miss Corn, nos sorprendieron con un pequeño ramenquin de esta crema. Le habían dado el punto perfecto. No he parado hasta robarle la receta a mi pobre prima y aquí queda compartida para el que quiera ensayarla.

CREMA CATALANA

INGREDIENTES
1 L leche.
50g Maicena.
6 yemas 250g azucar.
Canela en rama,corteza de naranja, limon (aromatizantes)

ELABORACIÓN
Cocer la leche junto con el azúcar y los aromatizantes.
Cuando hierva, retirar del fuego.
Aparte, batir las yemas junto con la maicena (se hara una masa).
Cuando esté todo bien batido colar la leche, para apartar los aromatizantes,  y unirla a la mezcla de yemas y maicena.
Volver a poner todo junto al fuego y, con una espátula de madera, remover la crema. Hay que moverla mucho, sin parar.
Jugar con la lumbre: retirar el cazo, sin parar de mover, meter otra vez al fuego (dándole vueltas todo el rato) retirar, etc. Conviene evitar que llegue a hervir para que no se corte el huevo.
Se sigue así hasta que la crema toma un color amarillento, sin grumos, y una textura compacta, similar a las de unas natillas.
Es importante retirar del fuego entonces. No se debe raspar la pase del cazo porque, si se agarrase, se estropearía la crema.
Cuando esté a punto, se retira a un bol. Se cubre con papel film, en contacto con la superficie, para que no haga costra. Dejar que se temple antes de meterla en la nevera a enfriar.
Al sacarla, antes de servir, se cubre con el azúcar y se flamea.

jueves, 16 de febrero de 2012

Hermanísima en Lituania (2ª parte)

Esta es la continuación del viaje de hermanísima (la 1º parte en este enlace). 


Castillo de Trakai sobre el lago Galve


Sábado 21 de enero de 2012:

Hoy ha sido sin duda el día más divertido. No hemos parado pero ha merecido la pena. No sé si sabéis que en Vilnius hay un río (el río Neris) que es parte fundamental del enfoque Lituano del Comenius (ya que nuestro proyecto se centra en el agua en la pintura, la literatura, la arquitectura...). Alrededor del río Neris, hay un entorno turístico bastante europeo comparado con otras zonas. Primero nos llevaron al Parque Natural (que vimos desde el autobús porque está sin hojas y cubierto de nieve). El Parque está cerrado en invierno por las condiciones climatológicas.  Después fuimos al lago de la ciudad de Trakai, que fue la capital de Lituania en la Edad Media, donde nos impresinó la reconstrucción estupenda de su castillo gótico situado dentro de una de las islas del lago Galve. Dentro de las salas del castillo había hasta calefacción, además de vitrinas repletas de objetos de la época y numerosos detalles de lo más interesantes.


Otra de las experiencias a recordar fue la sensación de caminar por el lago Galve que estaba completamente helado. No dejas de pensar que en cualquier momento se puede abrir el hielo bajo tus pies ¡qué fuerte! En esta zona compramos algunos recuerdos para los compañeros del cole después de regatear un poco (nos ha dado vergüenza regatear mucho porque todo era muy barato y los puestos están en la calle a bajo cero sin una mísera estufa). Muy cerquita del lago hay un restaurante típico donde se come uno de los más deliciosos menús lituanos: una empanadilla enorme rellena de lo que pidas que se acompaña de una sopa de pollo con verduras que está buenísima. Como los lituanos están pagando todo, nos ha dado corte pedir más de una pero creo que la mayoría nos habríamos tomado dos.

Para mí, el mejor momento ha sido el de la tarde: mientras mi compañera se quedaba organizando la reunión, Vaida y yo nos hemos ido a comprar mi chaquetón de piel de mutón color burdeos con capucha y un corte bien moderno ¡gracias papi! Para terminar el día, unos cuantos taxis nos han llevado a un sitio muy pijo que está a las a fueras de Vilnius a tomar algunos platillos típicos y algo más de cerveza. Hemos hablado de todo un poco y nos hemos reido muchísimo. Va a ser una pena tener que volver a la rutina después de tanta desconexión. Me esperan: casa, cole, compra, niñas...¡no lo quiero ni pensar!

Domingo 22 de enero de 2012:

¡He disfrutado el desayuno de hoy a tope! ¡Este salmón ahumado no se encuentra fácilmente! Después tocaba hacer maletas. Nos han dicho que podíamos dejarlas en la habitación, ya que los domingos sólo limpian las que se van a ocupar. Para despedirnos nos hemos ido a dar un paseillo por el centro de Vilnius y a hacer las últimas comprillas en los puestos callejeros, bajo el frío y la nieve, que lleva cayendo, sin parar, toda la mañana. El viaje de vuelta ha sido bastante bueno: sin retrasos ni contratiempos (aunque he tomado un pescado en el aeropuerto que me ha sentado fatal y me he pasado el vuelo sentada en el WC del avión. ¡Creía morir!). De la situación en la que me he encontrado mi casa al llegar, mejor no hago ningún comentario ya que aún estoy intentando olvidarla.

miércoles, 15 de febrero de 2012

Los hados cumplen el 15 de Febrero

El 15 de Febrero es un día de coincidencias. Era el cumpleaños de mi tía Pili. Mi mejor amiga del colegio de mi infancia vallisoletana también celebraba en esta fecha su onomástica y, tras nuestro regreso a Madrid, mi nueva mejor amiga, por una extraña jugada del destino, compartía fecha de nacimiento con la anterior.

Una vez empecé a trabajar, uno de esos pacientes que te obliga a estar diariamente pendiente de su evolución, para conseguir controlar su grave enfermedad, de esos en los que el trato convierte la relación médico-enfermo en un tipo singular de parentesco, también celebraba ese día su cumpleaños. Pero aún hay más: se da la coyuntura de que los padres de House se casaron un 15 de febrero. Se me escapa el porqué de este curioso sino. La única fecha a la que parece ocurrirle algo similar es a la de mi cumpleaños: siempre coincido con alguien, ya sea en clase o en el trabajo, que comparte mi aniversario. Curiosamente no es con nadie de mi familia, en la que los cumpleaños suelen ir a pares. El mío tampoco se puede decir que me pille sola y abandonada: un par de mis mejores amigas cumplen años dos y tres días antes que yo, mi tío Gris cumple el día antes, la hermana de mi abuelo lo hace 2 dos días después y, mi tía Lucky, transcurridos otro par de días más.

Así como con mi amiga de Valladolid el contacto es mínimo, por desgracia la distancia no contribuye al mantenimiento a largo plazo de las relaciones y, pese a ello, algo existe, con la de mi época preadolescente la amistad de ha mantenido pese al paso del tiempo. Las casualidades en su caso no se han limitado tan sólo a la fecha de su cumpleaños. También nos hemos encontrado en las prácticas de estudiantes, ella de Enfermería y yo de Medicina e, incluso, ambas acabamos trabajando durante un tiempo en el mismo hospital, tanto durante mi época de residente y, posteriormente en la esclavitud del contrato de guardias. Su turno importaba poco, al estar yo de guardia 24 horas seguidas, sólo dependía del estado de los pacientes hospitalizados, míos, suyos y de la urgencia. para poder dedicar un rato a charlar.

Ambas cambiamos de hospital con lo que ahora nos vemos muchísimo menos que por aquel entonces. Aún así, ha decidido que soy una buena asesora de compras con lo que, o bien utilizamos el que necesite algo para quedar, o bien directamente aprovechamos la salida como excusa para comprar. En los dos casos nuestros encuentros empiezan con una buena comida y continúan con un agradable paseo entre cotilleos y probadores. En estas fechas confío en que nos toque una de esas puestas al día.

¡MUCHÍSIMAS FELICIDADES!

martes, 14 de febrero de 2012

¡Feliz San Valentín!

Hay distintas modalidades de San Valentín, por si alguien lo dudaba. Está el primer San Valentín de la adolescencia en el que una espera, en vano, algún gesto por parte del amado (que no te ha hecho ni caso hasta entonces y que ese día va a seguir así). El San Valentín de los primeros amores, que una espera con ilusión de ilusa que sea una fecha de cine, llena de romanticismo, para encontrarse con que, para el genero masculino da lo mismo un día que otro y tener otras expectativas puede resultar frustrante. Una vez pasada esa fase inicial una se da cuenta de que el verdadero día de los enamorados se refleja en los detalles de la convivencia y que los mejores gestos son los que surgen espontáneamente. Está el San Valentín de los restaurantes, con un menú especial, elaborado y copioso, ideal para terminar un día entre semana con una cena indigesta y lucir al día siguiente unas hermosas ojeras, de esas que ningún corrector es capaz de borrar. No es posible olvidarse del San Valentín de los centros comerciales. Por si acaso, ya se encargan ellos mismos de recordárnoslo hasta la saciedad. Las tiendas ven en esa fecha una excusa perfecta para arreglar los números de un mal mes de febrero (es probable que incluso estuviese ahí el origen, poco claro, de esta celebración). He pensado que podría poner unos ejemplos de las actitudes esperables en algunos miembros de la familia . 


Cuñadísimo con la moto preparada 
especialmente por hermanísima 
para conmemorar el día 

El cariñoso Posti, no puede esperar
 más a recibir su beso del día.
La nota caballerosa del reformado Titón
 y su enamorada y futura esposa


Un comentario que bien podría ser de la Señora Baronesa
 o, simplemente, de la Señora

Mi cuñado, atento a las clases, en 
preparación a lo que se le avecina.


La acompañante de mi hermano
 preparándole una comida especial




y, al fin, mi entusiasta ataque a House



lunes, 13 de febrero de 2012

Segundas nupcias


El Beso- Rodin
Tras una relación larga, cuando una vuelve de nuevo al mercado de los sin pareja, se encuentra con que las opciones donde escoger se han acotado sobremanera. En vista de la panda de cabrones con la que se topa, es fácil quedarse con la amarga sensación de que es tarde y  "los buenos están pillados". Por supuesto una se resiste a aceptar esa premisa e insiste, sin ceder al desánimo. Por desgracia, la impresión se refuerza según se conocen más miembros de la susodicha panda. Finalmente llega a la conclusión de que, si están disponibles, es por algún motivo oculto que, cuando se descubre, una preferiría que hubiese seguido escondido. 

Siempre hay una luz al final del túnel y, en el caso de las parejas, llega en forma de "segunda hornada". Las relaciones largas de la primera juventud con frecuencia terminan antes de llegar al altar. Otras veces el error se advierte después de pasar por la vicaría. Muchas veces es la evolución natural del carácter de los miembros de la pareja lo que origina su distanciamiento. En los peores casos, algunos de los "buenos pillados" se dan cuenta, no sin cierto sufrimiento, de que no han sido atrapados por "las buenas". Según las características de su desengaño, este desemboca en crisis o directamente en ruptura. 

Según la personalidad de la víctima, se puede avivar un deseo de venganza. En ese caso, el rol se invierte y el individuo pasa a formar parte de esa panda de "machitos" que es mejor evitar. Se ensañará con su nueva pareja para descargar sus frustraciones y la culpa de su fracaso, en un estúpido intento de recuperar su hombría. Sin embargo, otros, más inteligentes o más románticos, no pierden la esperanza. El problema es distinguir entre un romántico verdadero y uno falso. Los verdaderos no suelen parecer tales de entrada, los falsos, sin embargo, se esfuerzan en explotar esa faceta. Estos últimos son los peores. Parecen tímidos y sensibles ¡ja!. Despliegan su inteligencia (los tontos lo tienen difícil para hacerte picar) y te engatusan con su galantería y su falso encanto para dejarte luego sumida en un "harakiri de culpas" (frase que me encanta de mi hermanita). En el mejor de los casos descubres su juego e, incluso, puedes intervenir para evitar el daño a sus otras víctimas (una de sus características es su juego a varias bandas). Esa revelación es, sin lugar a dudas, la mejor cura para superar el desengaño. 


Pero los verdaderos románticos existen. A veces son evidentes y se dejan ver de entrada y, en otras ocasiones, aparecen escondidos en forma de Dr. House o de matemático ermitaño. El hallazgo de uno merece la pena, aunque para ello una haya tenido que esperar al segundo turno y experimentar todo tipo de calamidades en el proceso. 

domingo, 12 de febrero de 2012

Whitney Houston - I Will Always Love You

En memoria de Whitney Houston. El primer vídeo es una canción de despedida que no puede ajustarse mejor a la triste situación. El segundo es mi favorito y está lleno de recuerdos. Sus románticas baladas están ligadas a mi adolescencia y mis primeros amores. Es una lástima que su infeliz matrimonio distase tanto de su maravillosa voz y de su música.




viernes, 10 de febrero de 2012

Sopa de zanahoria con queso de cabra

El contraste del sabor suave y algo dulce de la zanahoria con el del intenso y algo picante del queso de cabra le aporta personalidad a esta crema. Descubrimos esta combinación gracias al genio culinario de Juan Pablo Jiménez, en su época de "Cirilo", (luego se lo llevaron a Zalacaín, más tarde a Azabara y después, le surgió la oportunidad de trabajar de cocinero privado lo que le permite hacer lo que se le ocurre, con tranquilidad, sin la obligación de tener que sobrellevar la responsabilidad de un gran local sobre sus hombros.  Presenta el inconveniente de dejarnos sin la posibilidad de degustar sus platos cuando nos apetece). En Cirilo hacía un pastel de zanahoria cubierto con este tipo de queso, gratinado, que era espectacular. Otro uso que le daba a  este mismo queso consistía en batirlo hasta hacer una crema montada de textura más ligera y, junto con unos piñones tostados, ponerlo sobre un solomillo de buey y salsearlo con una reducción de cebolla confitada al Pedro Ximénez. Otro acierto.

Sopa de zanahoria con queso de cabra

1 kg. de zanahorias, peladas y cortadas (también se puede hacer con calabaza)
1 cebolla picada
3 tazas (750 ml) de agua
2 tazas (500 ml) de caldo de pollo
Sal y pimienta negra
Pan de un par de días cortado en rebanadas.
Aceite.
1/2 taza (125 ml) de nata líquida o leche evaporada.
1 rodaja de queso de cabra por cada comensal.
Albahaca para adornar.

Elaboración
Cocer las zanahorias y la cebolla en el agua. Una vez blandas, triturarlas. Añadir el caldo hasta obtener una textura cremosa y dejar hervir a fuego lento unos 10 minutos.
Condimentar con sal y pimienta.
Incorporar la nata.
Tostar las rebanadas de pan en tostadora o a la plancha, con un poco de aceite de oliva virgen extra en la sarten.
Poner la sopa en platos individuales.
Cubrir con el pan tostado con el queso de cabra.
Gratinar en el horno a máxima potencia con la bandeja alta, se necesitan sólo un par de minutos para que tome color o, también, simplemente hacerlo bajo el grill del microondas hasta que se dore. Cuidado al sacarlo que estará muy caliente.
Adornar con la albahaca y servir.

jueves, 9 de febrero de 2012

La cara oculta



¡Hasta la luna tiene una cara oculta que nunca enseña!

¿Quién no tiene recuerdos de los que se avergüenza y que lo único que le provocan al rememorarlos es un reflejo, que a imitación del de las avestruces, le obliga a taparse la cara con las manos o a cubrirse con las sábanas? ¿Quién no es asaltado por temores que no se atreve a reconocer?  A veces estos son, simplemente, delirios absurdos, y por ello fáciles de desestimar. No obstante, en otras ocasiones, lo que le estremece contiene un poso de realidad y resulta, por tanto, mucho más preocupante. Una lo entierra en lo más profundo de sí y cree que, por ello, desaparecerá. No suele ser así. Por el contrario, lo que hace es consolidarse, por mucho que, el atribulado en cuestión, se esfuerce en superar sus miedos. Se intenta que los demás no se den cuenta del grado de desasosiego suscitado por esa neurosis, sin darse cuenta de que ésta aprovecha para avivarse la soledad y las crisis personales de frustración o inseguridad. Eso sí, un simple destello de felicidad, un mero abrazo, es suficiente para calmar esa desazón irracional.

No penséis que voy a desvelar aquí mis más íntimos secretos, ni que voy a revelar las facetas más oscuras de mi personalidad.  Habrá que esperar a que el astro nocturno muestre su otro lado y espero que lo haga en una imagen tan bonita como la de la luna polar que ilustra esta entrada. Sólo mirarla es terapéutica.


miércoles, 8 de febrero de 2012

Hermanísima en Lituania (1ª Parte)

Estos son los correos de hermanísima con la experiencia de su interesante viaje a Lituania. Tengo la esperanza de que amplíe la información en un futuro, ya que falta la crónica de su último día.


Día 1: Aterrizaje

Llegamos a Vilnius sin retrasos, ni problemas, ni maletas perdidas. Otra suerte tuvieron los ingleses, franceses y turcos que llevan ni sé las horas de retraso. Como dice mi compañera, hace un frío de pelotas. Lo bueno es que los sitios están bien pero no muy calientes por lo que no hay que desnudarse al entrar.
Está nevando a todo nevar y la verdad es que esta zona es un poco fea y encima oscura, oscura, ya que, a esta hora, es casi de noche. Se nota mucho que estamos en Europa de Este aunque ellos estén muy orgullosos de ser europeos.
Como no sé a qué horas podré conectarme ya que tenemos un plan de trabajo concentradíiiiiisimo, ire poniendo correitos cuando pueda y ya os cuento.


Día 2: Impresiones
Hola a todos desde Lituania donde estoy aprendiendo un montón de cosas. Os contaré algo sobre mi día de hoy:

Estoy segura de que no os podéis imaginar que hay ciudades que no se paran aunque tengan 30 cm de nieve por todas partes (como mínimo) Hoy ha sido el día en el que hemos conocido la ciudad y hemos ido a TODOS los sitios andando: hemos visitado el parlamento, la catedral, el museo de la moda, el museo Lituano, la puerta de Mater Misericordia y hemos subido a lo alto de un cerro a ver la ciudad.

El camino no tenía sal y era cuesta arriba pero gracias a las botas de hermanita ni se me han mojado los pies, ni he pasado frío ni en los pies ni en el cuerpo. El único sitio donde me he helado ha sido la frente y la sensación es horrible por lo que me he comprado un gorro muy mono y baratito que es impermeable (ha nevado durante TODO el paseo) y tiene pelito en las orejas y en la frente. No tenemos ni idea de lo que es pasarse un día entero andando bajo la nieve, llega un momento en el que no sientes el cuerpo pero no notas el frío.

Hablando de cosas más personales, la gente es encantadora. Los Lituanos son reservados y prudentes pero cariñosos. En general son bastante feos y muchos de ellos huelen a sudor (parece que lo de la ducha diaria no se estila por aquí). Todo su afan es ser y parecer europeos. La verdad es que no hay delincuencia y la gente es un poco como era la gente en España hace unos 20 años (más idealista e inocente). Están muy orgullosos de su independencia conseguida hace 20 años y dicen que se parecen a los Letones. Muestran un cierto desprecio hacia los rusos y los polacos. Su lengua también tiene la misma raíz que la letona y no que la rusa. La comida es deliciosa, el pescado es buenísimo y las sopas también y todo es más barato que en españa menos las marcas internacionales, esas son mucho más baratas allí. Los abrigos de piel buenos (de mutón y piel vuelta con mutón dentro y tratados por fuera para que no se calen con la lluvia) se pueden comprar desde 400 o 500 euros (los bonitos). La verdad es que me encantaría comprarme uno ya que sé que es algo para toda la vida pero creo que nuestra economía no está para estos dispendios por lo que me quedará el recuerdo de ellos ya que son muy originales y diferentes a esos de vieja que se encuentran en España.

Mañana vamos al colegio: son cuatro horas de ida y cuatro de vuelta por las carreteras y todo eso. Los alumnos que han venido con las profes son encantadores por lo que ya os contaré mañana. Me voy a dormir.


Día 3: Colegio
Aquí es la una de la mañana y hemos llegado hace media hora después de levantarnos a las seis y media de la mañana. Menos mal que no ha nevado y hemos hecho las cuatro horas de ida y otras cuatro de vuelta en unas condiciones medio favorables (carreteras de doble sentido, temperaturas bajo cero y cuatro horas para doscientos kilómetros. El colegio era una pena: descascarillado, viejo feo, con un profesorado compuesto por viejas glorias (que parecían labradoras de películas rusas) y unos cuantos pobres diablos que deben de sacar adelante el trabajo y los proyectos. Somos muy afortunados de vivir como y donde vivimos porque el pueblo lo hemos visto de pasada y Sicilia 1920 es moderno comparado con él.

La verdad es que se puede decir que la población se divide en dos grupos: por un lado están los antiguos ciudadanos de lo que era la Europa del Este y por otro la gente de treinta años para abajo que es completamente europea y que tiene una visión de las cosas muy, pero que muy distinta a los mayores aunque todavía son sanotes. Son todos muy religiosos y son católicos, no son ortodoxos como yo creía.
El día a nivel de aprendizaje cultural está siendo muy interesante pero la verdad es que estos pobres no tienen de nada y ahora entiendo porque nos han traído a la capital todos los días en vez de que nos leudáramos en el pueblo. ¡Si no tiene ni una casa en condiciones! Los niños también se veían bastante desatendidos y con ropa y zapatos de mala calidad y escasos para las temperaturas. De todas formas los niños son niños y han escuchado nuestras presentaciones emocionados y además nos han representado una obra de teatro para cuya realización se han creado el vestuario con bolsas de plástico de mercadillo de distintos colores. El que quiere, puede aunque no tenga casi nada.

Las luces, el edificio, los baños, los pasillos...puede que lleven sus cincuenta años sin reformar tranquilamente. Vengo con una sensación agridulce y de pena por los profes tan encantadores que están al mando de otros que les ordenan y a los que obedecen sin rechistar aunque no tengan razón. Son muy orgullosos y si se equivocan (porque la organización y el horario son un desastre) no lo reconocen, le cargan el mochuelo a los que hablan inglés y encima les gritan delante de nosotros (puede que no sepamos lituano pero el lenguaje corporal y gestual se conoce en todas partes). Todo es muy diferente. Hay mucho que contar.Voy a llegar para que me lleven en parihuelas porque tengo unas agujetas de andar por la nieve que pa que.

martes, 7 de febrero de 2012

Dickens cumple 200 años

La literatura inglesa del XVIII, XIX y principios del XX se cuenta entre mis favoritas. Se han cumplido 200 años del nacimiento de Charles Dickens, acaecido el 7 de Febrero de 1812 en Portsmouth, ocasión que ha sido aprovechada para reeditar algunas de sus obras.

Dickens reflejó como nadie el ambiente callejero y de explotación infantil de la Inglaterra victoriana. Lógicamente, los protagonistas de buena parte de sus obras son niños. Supongo que ese es el motivo por lo que muchos consideran su obra como literatura infantil. Craso error, al menos en mi opinión. Pasar de los cuentos de hadas, aunque muchos de los de Andersen no tengan precisamente un final feliz, a la miseria de los suburbios de Londres puede resultar algo traumático. Al principio, una espera encontrar un paralelismo con la historia de La Cenicienta y, al cerrar el libro, relee el capítulo final con cierta incredulidad. Recuerdo pasar los ojos por los párrafos con la esperanza de que algún milagro hubiese borrado de la trama los malos tratos infligidos al sufrido protagonista.

Posiblemente la obra más conocida, por ser la más versionada cinematográficamente, es Oliver Twist. No obstante, esa historia dista mucho de contar entre mis favoritas.  Aún así, es sabido que los niños tienen un punto masoquista y, debe de ser por ello, por lo que, pese a terminar por aceptar que no hay ni mágicos milagros ni hadas madrinas, una lee y relee las desventuras de David Copperfield, la pequeña Dorrit o el mismo Oliver.

Otra obra que una agarra con ignorante inocencia, erróneamente sugestionada por la palabra "cuento" del título, es "Un cuento de Navidad". Se encuentra con que el protagonista es un viejo, gruñón y poco atractivo y, para colmo de males, cruel y roñoso (el único avaro que le gusta a los niños es el tío Gilito y eso es efecto de la magia de Disney). Aún así, el poder del título vence las reticencias del lector y prosigue con el relato para sumergirse en la desgraciada vida de Scrooge de la mano de los tres rencorosos espectros. ¡Menos mal que aparece el pequeño Tim! ¿Menos mal? Tras su escena, la infantil lectora rompe en un llanto inconsolable.  Eso sí, una vez que se empieza, hay que llegar hasta el final, para lograr consolarse.

Cuento de Navidad ha sido llevada al cine aún en más ocasiones que Oliver Twist. Por mucho que una pretenda evitar su visionado, resulta incluso más difícil que librarse del pase de Mujercitas en vacaciones. Siempre habrá algún canal en el que emitan alguna versión, de la que no habrá escapatoria posible, especialmente tras el comentario de algún sádico sobre lo "bonita" que es esa historia (en lo que se refiere a Mujercitas, es fácil que alguien diga que ¡menuda cursilada! y cambie de cadena para caer en Scrooge).

Con ese animado Dickens, cuando mi padre me llegó a los 8 ó 9 años con el grueso tomo de animado título "Los papeles póstumos del Club Pickwick" e intentó venderme sus bondades, yo estaba más que escarmentada y dejé su recomendación en la estantería. Todavía estaba fresca en mi memoria la reciente experiencia en la que me había convencido para leerme una versión comentada del Quijote en 20 tomos (con más anotaciones que texto), a la que sobreviví a duras penas, por lo que he de reconocer que no estaba muy receptiva a sus sugerencias. La psicología inversa de la que hizo gala mi progenitor durante una temporada no contribuyó a fomentar el atractivo del libro. Se convirtió en una espada literaria que flotaba sobre mi cabeza y la de mis hermanos y con la que se nos amenazaba, no sin algo de guasa, casi a modo de castigo. Lo cogí unos años más tarde, a escondidas, sin decirle nada a nadie, y descubrí, no sin cierta sorpresa, que mi antecesor tenía razón y el libro era divertidísimo. Por desgracia, pese a mi insistencia, o puede que por culpa de ella, mis hermanos no me creyeron. Supongo que, o no confían por completo en todos mis gustos literarios, o simplemente es que todavía no han superado la leyenda negra familiar que rodea este libro.

Aún así, el genial Club Pickwick no es mi obra favorita del autor inglés, sino que el lugar de honor lo ocupa la maravillosa "Historia de dos ciudades". Como esta es una obra de madurez de Dickens y los protagonistas no son niños, no es obligado leerla en la infancia. Su evocadora introducción: «Era el mejor de los tiempos, era el peor de los tiempos. Era la edad de la sabiduría, y también de la locura. Era la época de la fe, y también de la incredulidad, la estación de la luz y la de las tinieblas; era la primavera de la esperanza y el invierno de la desesperación. Todo se nos ofrecía como nuestro, pero no eramos dueños de nada, íbamos directos al cielo pero nos precipitábamos en el infierno. En fin, era una época tan parecida a todas las épocas, que nada de lo que aquí voy a contar debería, en realidad, sorprendernos. Nada. Ni el perdón, ni la venganza, ni la muerte, ni la resurrección», su romántica trama, en el marco de la Revolución Francesa, con sus entrañables y humanos personajes, extraordinariamente retratados, sus valores y, su emocionante final, han hecho de este, uno de esos libros que dejan una huella inolvidable y, es por ello por lo que siempre necesito tener un ejemplar en casa.

lunes, 6 de febrero de 2012

Tom y Jerry

Hay relaciones en las que sus protagonistas se comportan del mismo modo que Tom y Jerry. No se pueden alejar demasiado pero, si están juntos, su manera de disfrutar de la relación se basan en chincharse uno a otro. Esto es típico entre hermanos, que compiten por su territorio y miden su influencia.   Cuando uno está tranquilo, el otro busca la manera de sacarle de su estado y de sus casillas. Poco a poco, estira de la cuerda, la tensa sin romperla, hasta hacerle estallar. Tras disfrutar un rato de la situación provocada, se las apaña para devolver la relación a un cauce de aguas más tranquilas y recuperar la mutua concordia.

En algunos casos este proceder se perpetúa aún pasada la infancia. Para ello sólo es necesario que los dos miembros de la pareja se deleiten con esta práctica. Por el contrario, "si uno no quiere, dos no discuten", aunque el uno ponga en ello todo su empeño. Esto puede llegar a resultar frustrante. Sin el sabor de ese aderezo, la salsa de la vida es insulsa y aburrida y, el calor del momento, mantiene la llama encendida.

Por supuesto, al igual que en los dibujos animados, el papel de picajoso y picado se intercambian con frecuencia. Ambas partes se esfuerzan por darle la vuelta a la mayor tontería que se les ocurre. Para entretenerse con la dialéctica de una buena discusión de este tipo, nunca el irritante debe revestir verdadera importancia. Claro que, con frecuencia, los razonamientos no van más allá del de un diálogo de besugos. Para los ocasionales testigos puede suponer una causa de incomodidad. El tiempo les hará ver que no es más que una pauta diferente en el singular mundo de las relaciones y lo tratará como tal. Si son sensatos, lo dejarán correr sin inmiscuirse en los temas de pareja, so pena de ser ellos los escaldados.


viernes, 3 de febrero de 2012

TARTA DE QUESO CON CALABAZA

La sabrosa tarta de queso, no esas insipidas industriales que venden como tales, siempre ha sido una de mis favoritas. Si es la de mi tía, es indiscutiblemente la primera de la lista. Mi angelical prima lo sabe y me la prepara por mi cumpleaños. La mayoría de las veces no quedan de ella ni las migas pero, si se diese el caso de que los convidados no tuviesen suficiente hueco para devorarla por completo, me llevo los restos y me los desayuno al día siguiente. Es, sin duda, el mejor de los desayunos.

La combinación de cheesecake con calabaza sólo la he probado en una ocasión. Fue en el Cheesecake Factory de Los Ángeles. Llevaba además unos chocolate chips entremezclados. La calabaza contribuía con su peculiar sabor dulce a la personalidad del pastel y el resultado me encantó.

PUMPKIN CHEESECAKE

1 lámina de masa de hojaldre o pasta brisa. También se puede usar una tartaleta ya preparada o simplemente una base de galletas machacadas con mantequilla (medio paquete de Digestive o María con 60 gr de mantequilla). Un toque original se consigue al triturar las Oreo o las Chips-Ahoy (en estos dos casos no se precisa mantequilla, la grasa de la propia galleta es suficiente)

Para el relleno
1 taza de azúcar moreno
2 cucharadas grandes de harina
½ cucharadita de canela molida
½ taza de leche
1 tarrina de queso crema tipo Philadelphia (sirve el light de esta marca) de unos 200gr
4 huevos grandes (separar claras y yemas para conseguir una textura más ligera)
1 cucharadita de extracto puro de vainilla
1 taza de puré de calabaza a la que se le ha añadido ralladura de naranja y 1/2 cucharadita de cardamomo molido (se puede sustituir por jengibre).

Masa
Estirar la masa sobre una superficie ligeramente enharinada, formando un círculo de aprox 30cm. Enrollarla alrededor del rodillo de amasar y, sin estirar, colocarla dentro de un molde profundo de unos 23cm. Presionarla contra el fondo y los lados del molde. Recortar con unas tijeras los bordes de la masa hasta que sobresalga unos 2,5cm y plegar para dejar un borde elevado. Refrigerar mínimo unos 30 min.

Calentar el horno a 180°C. Pinchar la masa, cubrir con unos garbanzos para evitar que suba y cocer hasta que empiece a tomar un ligero color (unos 7-8 minutos)

Relleno
En un cuenco grande, batir el azúcar moreno, la harina, canela, hasta obtener una mezcla homogénea. Incorporar la leche, el queso, las yemas de los huevos, la vainilla y el puré.

Batir las claras a punto de nieve muy fuerte. Añadir con cuidado y poco a poco al resto de los ingredientes.

Verter la mezcla dentro de la masa. Hornear a 180º aproximadamente 1 hora, o hasta que el pastel cuaje, firme pero con un mínimo movimiento ondulante en el centro. Dejar enfriar sobre una base de rejilla. Servir a temperatura ambiente o frío.

jueves, 2 de febrero de 2012

Despilfarros

Decir que la Sanidad está en crisis no es ninguna primicia. Como el resto de los funcionarios, los médicos nos vemos obligados a apretarnos el cinturón para mantener un sistema sanitario del Estado de Bienestar con atención gratuita a todo el mundo. Este concepto incluye al Mundo en su totalidad, independientemente de su nacionalidad y su lugar de residencia habitual. Pasamos de un estado de bienestar a uno de beneficencia, pero no sólo para ciudadanos de países pobres y necesitados, sino que también se cubren los deficits de los seguros estatales de territorios europeos cuyos enfermos emigran, no sólo a nuestro sol, sino también a nuestros hospitales. Las prótesis "made in Spain" gozan de fama universal.

Las medidas anticrisis incluyen un aumento del horario laboral con una reducción del sueldo, que se supone iba a sufrir un incremento lento y progresivo tras las últimas negociaciones con las altas esferas para compensar la pérdida de poder adquisitivo de los médicos durante las últimas décadas. Esto ocurrió hace años y ha sido relegado al limbo de las promesas políticas. El problema surge cuando se ve cómo, desde los organismos estatales, se despilfarra el dinero. Antes que reponer el instrumental quirúrgico estropeado (que un día, no muy lejano, vamos a tener que usar los dientes para cortar los hilos de sutura), prefieren poner máquinas expendedoras de pijamas. Para obtener una de esas prendas de alta costura es preciso utilizar la tarjeta de empleado. Una vez hacen entrega del precioso paquete, no conceden otro hasta el día siguiente, por supuesto previa devolución del anterior. Más vale no mancharse con sangre o fluidos corporales de los pacientes durante las cirugías, so pena de tener que permanecer con los restos pegados en la ropa durante las 24 horas de una guardia. Eso, y tener suerte para que, la maquinita en cuestión, disponga de la talla adecuada del pijama, que enfundarse en uno en el que se cabe dos veces es casi igual de incómodo que cuando más que vestirse hay que embutirse en él (lo que ocurre cuando un cirujano XXL se encuentra con una talla S en la mano). Al menos unos pegotes de esparadrapo sujetan el pijama en su lugar cuando es demasiado amplio.

La vocación suple muchas cosas aunque el descontento de los pacientes por las listas de espera sea difícil de lidiar en el día a día. Las listas de citaciones están, no ya llenas sino saturadas, con los huecos duplicados para poder revisar la oncología cuando se debe y no cuando se puede. Se atienden pacientes imprevistos, sin cita o colándoles en días dedicados a otro tipo de asistencia diferente a la actividad de consulta. Aunque se carezca de espacio físico para la visita, el problema se subsana con la cooperación del resto de los afectados, y unas buenas cortinas. ¡Viva la intimidad y la ley de protección de datos!

Por supuesto se construyen nuevos centros sin tener en cuenta la estructura de los ya existentes, pensada en su origen con la idea en la cabeza de su necesidad de expansión. Claro que esto no tiene el mismo tirón electoral que el vender la finalización del proyecto de un nuevo hospital (aunque el precio lo haya pagado el incauto votante). Desde hace dos años no se paga a los laboratorios farmacéuticos, claro que el aumento del número de farmacias hospitalarias redunda en su beneficio, aunque sea de su deuda.

Eso por no hablar de todo el sinsentido con que llevan a cabo el concepto de "hospital sin papeles". Se imprimen y se plastifican octavillas con las preguntas del checklist, sobre el que aún no se han puesto de acuerdo en cómo hay que llevar a cabo. Debe de ser que, en previsión a los recortes en la conexión a Internet en los ordenadores de quirófano, si la informática no funciona siempre se tiene la "chuleta" a mano. Igualmente se han sustituido los clásicos sobres en los que meter el informe de alta por unas carpetas de cartón (supongo que debe de ser reciclado y la ecología justifica el cambio) con todo tipo de notas y encuestas para el paciente. No sé si la idea es despistar de esa manera la inclusión de la factura informativa con los gastos derivados por su ingreso. Me pregunto si van a incluir también el precio de la carpeta en esa información.


Supongo, y no soy la única, que la idea del gobierno es cabrear a los trabajadores hasta llevarles a tomar medidas con las que se "vean forzados" a instaurar el famoso copago. Pero entonces la culpa será achacable, como siempre, a los poco colaboradores sanitarios.