El buen uso del lenguaje incluye no sólo la riqueza de vocabulario, que permite expresar con precisión lo que una desea, sino también el emplearlo de modo figurado y sobreentender que los oyentes lo interpretarán así, y no literalmente.
Cuando una abuela dice que se comería a su nieto, aunque muchas veces a una le apetecería que lo cumpliese y librase al mundo del verraco en cuestión, nadie lo interpreta en su sentido literal de antropofagia sino que comprende que se refiere a lo tierno y gracioso que le resulta el chiquillo. Aunque hay quien tiene razón, la mayoría suele estar cegada por la pasión de abuela, que no les permite ver la auténtica realidad.
Igualmente en un momento de crispación se puede decir que "se mataría a alguien". Si esto fuese literal no habría discusiones al respecto de la jubilación de los políticos ya que ninguno sobreviviría a su mandato. El problema surge cuando el interlocutor es un inculto o tiene una lengua materna diferente. El ponente asume que posee un nivel mínimo de español y, al no ser así, el ignorante asistente a la conferencia interpreta literalmente la expresión. No se deja orientar por la reacción de sus compañeros, que se ríen ante la gracia del chiste. El pobre orador puede verse en el brete de que la policía se presente de forma inesperada e intempestiva en la puerta del domicilio. El confeso homicida, al menos de intención, se verá obligado a dar una clase de lingüística avanzada en comisaría para no terminar con sus huesos en el calabozo. Con bastante comprensión y sentido del humor por parte de los agentes, y aún mejor suerte si alguno de ellos domina el español mejor que el malpensado oyente, la cosa no trascenderá hasta los juzgados, donde sería el letrado el encargado de explicarle las peculiaridades idiomáticas al Sr. Juez.
Aclarar las cosas con el anónimo y cobarde acusador es harina de otro costal. Nunca dará la cara y convertirá en incómodas las situaciones en las que se reúna el mismo grupo de gente que en aquella charla malinterpretada. Por supuesto, además de ignorante, suele ser un vago bastante estúpido pero está claro que, aunque uno lo mataría para deshacerse de él, aquí la frase vuelve a tener un sentido figurado.
2 comentarios:
Pues me lo he tenido que leer un par de veces para enterarme, porque a la primera no lo he pillado muy bien y he flipao, eso sí, la niña se ha quedado tan agusto.
Besosss
Bueno, Paco, eso es una prueba de salud mental, porque a nadie en su sano juicio se le ocurre abalanzarse y detener a una madre que le dice al niño "te como"y se lanza sobre él, ni llamar a comisaría si alguien está viendo un partido de fútbol y grita "os mato a todos" porque la barrera no está bien colocada y le meten un gol a su equipo por patéticos. Entender a la primera lo que quiere decir Grumpy seguramente requiere ser docente y estar por ello acostumbrado a la mala baba que pueden tener algunos individuos (no los llamaré alumnos) en clase y cómo están dispuestos a hacer daño al profesor aprovechando los resquicios que les deja una sociedad que cada vez parece más pensada para subnormales.
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