sábado, 18 de agosto de 2012

BRINDIS

"El Brindis" Manet

Venga una copa de vino
que se llene del recuerdo
de los brindis del abuelo
al concluir la reunión.

Aún le veo levantarse
mientras se hacía el silencio,
y con la copa en la mano
improvisaba unos versos

Brindaba por la familia,
brindaba por el amor,
brindaba con voz potente
surgiendo del corazón. 

Sus palabras eran claras,
sus frases eran sencillas,
no necesitaba adornos
para reflejar su vida. 

Compartía en su poesía
su sobria sabiduría,
su gran calidad humana 
y su constancia ejemplar.

Al finalizar... aplausos.
Entre emociones y besos
chocaban todas las copas
y se pedían deseos. 

Deseo no olvidar nunca,
atesorar ese tiempo,
saborearlo despacio,
cual los versos de mi abuelo.

"SAINT EMILION" Philippe Sommer

Hoy se cumplen 21 años de su último brindis, pero el legado del abuelo sigue presente en cada reunión. 


2 comentarios:

Rafa-MrMagoo dijo...

DESPUES DE UNA OPIPARA COMIDA
A LA ORILLITA DEL MAR,
LEIMOS TU POESÍA
Y NOS PUSIMOS A BRINDAR.

Anónimo dijo...

Yo tuve la satisfacción de compartir con él sus últimos veinticinco años y todos los días nos tomábamos, al menos, un par de copas de vino como si fuese un acostumbrado brindis por el simple placer de seguir viviendo, o bebiendo, que también.

Hoy seguro que habrá brindado por la autora de la entrada con ese tono cadencioso que lo caracterizaba. El abuelo Andrés ha sido y seguirá siendo un ejemplo de honradez para todos nosotros. Levanto mi copa por él.

Un beso, JMD.