martes, 7 de agosto de 2012

La brújula de la familia

La entereza es una de las mayores virtudes de mi madre, quizás la que mejor define su carácter. Siempre es un apoyo firme con el que se puede contar. Ve las cosas con perspectiva y objetividad y su punto de vista es, cuanto menos, una referencia a tener en cuenta, incluso aunque no siempre se esté completamente de acuerdo con ella. En caso de discrepancia conserva cierta flexibilidad que permite discutir las diversas opciones, y aunque ambas somos bastante cabezotas, debido básicamente a la solidez de nuestras convicciones, solemos alcanzar un entendimiento.

Otra de sus principales características es su gran independencia, motivada por las circunstancias y empujada por la claridad de ideas que siempre la han hecho avanzar y abrirse camino. Mientras mi padre optó por seguir dando rienda suelta a su espíritu nómada, y migrar cada temporada a distintos puntos a lo largo y ancho del planeta, ella decidió que, con cuatro infantes a rastras, ese ritmo de vida resultaba inviable y convirtió la casa común en un hogar estable para nosotros y una base fija para las intermitentes estancias de mi progenitor.

Durante sus periplos por el mundo, se ha adaptado sin problemas a los más diversos lugares. En cada uno de ellos, su fortaleza y su integridad eran valores rápidamente reconocidos y acababan por arrastrar a un círculo de amistades entrañables a su alrededor, que mi madre ha sabido mantener pese al paso del tiempo y a las diversas mudanzas.

La Señora afirma que nunca ha sido dueña de un gran instinto maternal, cosa que ha demostrado no estando todo el día encima de nosotros como si fuésemos de cristal. No creo que nuestro carácter, fruto de los genes combinados de ambos progenitores, hubiese tolerado bien la sobreprotección con la que muchos padres ahogan a sus criaturas. Esta hereditaria autonomía hace que pequemos, en ocasiones, de exceso de independencia y de opiniones. Como contrapartida, siempre ha hecho gala de tener los pies en el suelo, y sabe sacar lo mejor de cada experiencia, lo que nos permite contar con sus buenos consejos cada vez que recurrimos a ella, lo que paradójicamente sucede con cierta regularidad. Es el eje alrededor del cual giramos los hermanos.

"Las Meninas" Velázquez
Ha conseguido alcanzar el deseado equilibrio del punto medio que tan pocos privilegiados logran. Sopesa con calma sus decisiones. Es organizada, optimista, sensata y sociable, sin ser expansiva. Suele procurar extraer lo bueno de cada cosa y disfruta ante casi cualquier situación. Le apasionan el arte y la literatura, y no se pierde su visita semanal al Prado, salvo que le pille en los Uffizi de Florencia o en cualquier otro museo del mundo.

¡FELIZ CUMPLEAÑOS MAMÁ!

10 comentarios:

El tito Paco dijo...

Muchas felicidades. Hoy espera uno de esos días que tanto le gustan a la Señora, así que ¡a disfrutar! Con los recientes recuerdos museísticos será más fácil todavía.

Anónimo dijo...

Dice Cicerón en su tratado de Amicitia: “De todos los dones que la fortuna me ha concedido ninguno comparable a mi amistad con Escipión”.
Felicidades amiga, felicidades hermana. Un beso Y&G

Anónimo dijo...

¿Alguien recuerda haber visto a Señora enfadada alguna vez? Ni siquiera cuando pierde su Real Madrid.

Yo añadiría que es una mujer cariñosa y espléndida (siempre tiene el monedero abierto) Disfruta con los éxitos de los demás. Uno se siente a gusto con su presencia. Pacuelo es un regalo de cumpleaños difícil de superar.

Feliz Cumpleaños. Un beso, tito Pepe.

Anónimo dijo...

Señora, en mi opinión, es la que más se parece a nuestro padre, sobre todo, en lo trabajadora, sin olvidarse de su inteligencia y capacidad de superación en los momentos delicados. De mamá ha heredado su gran capacidad de convocatoria “Si tu me dices ven…. Lo dejo todo” . Con ella he compartido momentos inolvidables, mi primer viaje a Canadá donde disfrute de nuevas y buenas experiencias a mis trece años. Siempre ha estado cuando la he necesitado.

Muchas Felicidades y un beso muy fuerte. Tu hermana Li.

House dijo...

Dice Grumpy que ella y la Señora son cabezotas. Yo diría que más bien son firmes y constantes, sólidas y estables. Personas en quienes confiar por sus principios, por su inteligencia y por su entrega.
Para mí es un privilegio poder contar con ellas y una suerte poder desearle a La Señora un año más de felicidad.

Anónimo dijo...

Ayer decías no me veo dentro de veinte años sin actividad ,llevas razón ,tendrás todavía más cosas que hacer y que descubrir y sobretodo disfrutar.Ya me lo contarás.
Un beso muy grande .FELICIDADES.
Maria.

House dijo...

Dice Grumpy que ella y la Señora son cabezotas. Yo diría que más bien son firmes y constantes, sólidas y estables. Personas en quienes confiar por sus principios, por su inteligencia y por su entrega.
Para mí es un privilegio poder contar con ellas y una suerte poder desearle a La Señora un año más de felicidad.

Märkostren dijo...

Tendria que decir "amén" tanbtas veces y por tantos motivos, que me voy a conformar con decoir: Muchas felicidades y que sigas repartierndo felicidad.

Un fuerte abrazo desde Barcelona (hoy, mañana ya veemos donde estamos).

Carmen dijo...

Mi vida sin mi madre sería distinta pero lo que tengo muy claro es que sería peor. A los padres se les quiere el triple después de tener hijos y además por fin se les entiende.
Siempre que me dicen que me parezco a mi madre, me lleno de orgullo. Desde que nacieron mis hijas he pasado con ella momentos inolvidables y me ha demostrado que tiene mucho más instinto abuelil que ninguna otra cosa. El nacimiento de nuestro Menino ha sido la última experiencia que hemos disfrutado juntas ¡No podría haber tenido mejor abuela el chiquitín! Gracias mamá por tantos momentos que hemos pasado juntas y brindo por los venideros. ¡ Feliz cumpleaños!

Märkostren dijo...

Es curioso, en este mes de agosto y con muy poca diferencia de fechas tenemos los cumpleaños de Señora y Pacuelo,(7), el de Lucas,(8), el de Pili, (12) y el de Mari Carmen, (13).

Se nota que somos una familia bastante "acalorada".