martes, 1 de julio de 2014

Trienio

Hoy el blog cumple tres años. ¿Qué ha sucedido en este tiempo?

1010 entradas, un número bonito pero que parece ser también el límite de mis ideas. Sé que la medicina da mucho de sí como fuente de anécdotas, el problema es que son cuestiones personales de mis pacientes y, aunque sea de un modo impersonal, no me parece bien divulgarlas. Podría explicar técnicas quirúrgicas y algunos trucos prácticos que he aprendido con la experiencia pero mucho me temo que mi número de lectores caería drásticamente. ¿A quién le interesa saber en qué consiste una cirugía de parótida y cuál es el mejor método, en mi opinión, para encontrar el nervio facial? ¿o cómo se realiza una disección de cuello y qué hacer en la transición de un paso a otro? ¿Quién ha llegado hasta este punto y se está planteando si dejar de leer este post? (les aconsejo leer Paloma en su lugar)

No deseo repetirme en los post y, al igual que en las reuniones, me aterra no saber de qué hablar. Al final es justo eso lo que sucede: no se me ocurre ningún tema de conversación, al menos ninguno medio entretenido, no soy una buena animadora, y si me esfuerzo me convierto en pésima, además de parecer tonta. Afortunadamente el resto del mundo no comparte mi problema aunque, cuando todos hablan a la vez, no estoy segura de que ese don sea una suerte.

El número de miembros del blog es casi una constante. Reconozco el mérito de los que han llegado hasta él por casualidad. Con semejante nombre no se lo puse fácil. Lo que si ha crecido es el número de corresponsales que reciben mi correo mañanero para que desayunen con el post del día. He conseguido que desconecten por la noche el sonido de aviso de mensajes entrantes, nadie desea despertarse a leer nada a esas horas intempestivas. Los que no lo han hecho me tienen incluida en la sección de spam.

¿Cuántas visitas? He mirado el contador al escribir este post y estoy cerca de 157000. Eso da una media de algo más de 50000 al año, que no es mala cifra. Recibo visitas de los lugares más insospechados, supongo que por las imágenes. Hay días en los que de repente la cifra se dispara, he descubierto que el pico viene de los USA, no sé si el FBI me tiene controlada. ¿Pensarán acaso que hay mensajes cifrados ocultos en mis cuentos? Pues que busquen, que busquen. La clave está en Paloma.

7 comentarios:

ELVIRA dijo...

¡3 años ya de blog! 3 años de cuentos, historias, reflexiones, recuerdos, anécdotas y experiencias. Me resulta difícil escoger mis entradas favoritas, me suelen gustar las recetas con historia, las recomendaciones de tiendas y los desahogos espontáneos, ya que dan un toque de frescura y nos dejan entrever quién se esconde detrás de grumpy.

Una compañera de trabajo me preguntó un día por el nombre del blog (le encantan las imágenes y suele tener dificultades en encontrarlo) y le conté la historia del felpudo, y de cómo terminamos no reconociendo al "old grump" de aquel apartamento. Supongo que no es el mejor nombre para conseguir publicidad, sin embargo a mi me parece el primer toque de personalidad de un blog anónimo, pero no impersonal.

Carmen dijo...

Mis historias favoritas son las de cuando éramos pequeños: las de la granja, el chalet, la casa de Galileo, las técnicas educativas de nuestros padres; también me encantan las historias prestadas por otros lectores que rompen la monotonía del blog.
Por otro lado, los post que no me gustan son aquellos en que grumpy se pone mística, tierna o romántica. Nunca los comento porque no se me ocurre nada que decir. Supongo que la cercanía no ayuda y no consigo pensar en la escritora como alguien ajeno a mí. Me resulta un poco violento entrar en sentimientos o sensaciones privadas.
Las entradas de humor y las de crítica social con ese toque sarcástico tan característico tuyo tambien son algunas de mis entradas favoritas.
Por último una sugerencia: Estoy segura de que si te llevas a ciclón y a sobrinísima una tarde, una mañana o un día entero por ahí, te salen tres o cuatro futuras entradas.
¡Muchas felicidades blog!

José Miguel Díaz dijo...

Las cifras son geniales...¡madre mía 1010 entradas!
Felicidades por el trienio y muchas gracias por regalarnos tanto talento.
Por cierto, no me creo que se te haya acabado la inspiración ¿Has pensado en usar tus conocimientos hospitalarios para escribir una novela sobre el tema?
Es un tema apasionante, tan solo hay que ver la cantidad de series televisivas que ha inspirado.
No hay mejor ficción que la que está aderezada con toques de pura y dura realidad.
Muchos besos

Manuel Márquez dijo...

Hola, Sol, buenas tardes; son cifras, las de tiempo y las de contador de visitas, más que respetables, y denotan ya un poso que no es poca cosa. A mí, ajeno a las entretelas familiares que suelen ser materia habitual en tu cibercasa, me costaría trabajo destacar alguna reseña en particular; cuando me ha gustado alguna en especial, te lo he indicado, normalmente por esta vía. No recuerdo ahora cómo llegué hasta aquí (creo recordar que a través de algún enlace de otro blog, o de algún comentario tuyo en otro blog, o algo similar), pero sí sé por qué me quedé, y por qué lo sigo visitando con asiduidad: tienes una escritura atractiva, hermosa y de grata lectura. No es algo fácil de encontrar, bien te consta...

Un abrazo, y por muchos años más...

María José dijo...

Pero ¿qué dices, Sol? A ti nunca se te van a agotar las ideas, eres una fuente inagotable de magia y fantasía. Paloma es una maravillosa amiga con quien compartir ratos entrañables, pero tus relatos tienen algo de ti, todos ellos, y es un placer descubrirte gotita a gotita cada mañana. Me honra estar entre tus seguidores asiduos. Un beso y ¡adelante!

Sol Elarien dijo...

Muchas gracias por las felicitaciones. Sois de mis comentaristas más asiduos y no os podéis figurar cuánto os lo agradezco. Muchos besos. Sol.

amigademadre dijo...

No quisiera que se me pasé este aniversario sin felicitación expresa en el blog.
Recuerdo que la misma mañana que lo escribiste te envíe algo personal que no podía enviar como comentario de entrada.
Como me entran de nuevo enormes ganas de felicitarte - todos los santos/cumples tienen su octava, dicen en mi pueblo,
FELICIDADES ¡ que cumplas muchos !