miércoles, 21 de noviembre de 2012

Fósiles del planeta Gavín


Tras el eclipse la luna ilumina las desgastadas mesetas tibiales de un mágico mundo de fantasía. Sobre las colinas onduladas de los cóndilos se elevan los fragmentos de roca de una gastada rótula. Entre sus sueños Javier Comas ha descubierto los delicados fósiles olvidados del planeta Gavín. En su obra recorre, al igual que una sonda espacial, las suaves dunas de ese antiguo desierto en busca de los restos de su vida pasada.

Junto a las estrellas se asoman a la noche semillas enterradas que otrora arrastró el viento. Al amanecer la luz dorada revela esqueletos de murciélagos que se colaron en sus cielos y que reposan para siempre en la pendiente de sus laderas. Escondido en sus simas aún quedan restos del mar de líquido sinovial en los que flota, a la deriva, el recuerdo cristalino de una hoja hundida. Su silueta evoca la imagen de un árbol perdido en medio de un bosque que ya no existe.

Los fósiles del planeta Gavín conforman una colección exquisita, de sutiles sombras apenas esbozadas, perfiladas entre los gráciles relieves de un mundo perdido.

5 comentarios:

Comas dijo...

No sé que tiene más belleza si tus palabras o mis obras, las cuales has entendido como si fueran parte de ti. Extremadamnete agradecido, un cariñoso abrazo. Javier

Anónimo dijo...

Estuve en la exposición de Javi. Totalmente de acuerdo

Anónimo dijo...

Va a ser verdad que el arte no tiene fronteras y mucho menos las formas de expresarlo.

Javier Comas, me gusta tu obra.

Un cordial saludo, JMD.

Comas dijo...

Gracias JMD, pero como dicen en "Las mil y una noche". La verdad no es solo un sueño, sino muchos sueños. Y las palabras de Niágara, enoblecen mi obra

Amanda dijo...

Es apasionante contemplar como puede crecer la abstracción y la fantasía a través de algo tan concreto como una prueba de imagen...
No sólo en la obra de Javier, sino también en las bellas palabras que leo por aquí.

Gracias por compartir y enhorabuena a ambos.